Nuestra historia
La historia de Selección Artesana Jabugo comienza hace tres décadas en el pueblo serrano de Santa Ana La Real. Desde entonces hemos aportado nuestra sabiduría en la crianza del cerdo ibérico y la fabricación artesanal de jamones, paletas y embutidos ibéricos. Nos enorgullecemos de ser una empresa familiar en la que cuidamos minuciosamente el largo proceso productivo sin perder la esencia tradicional en cada una de sus fases; vida en libertad de los cerdos en la dehesa, sacrificio en Jabugo, elaboración de embutidos y secado natural de jamones y paletas. Todo ello con un único objetivo que disfrutes del placer del auténtico ibérico de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche estés donde estés.
La Esparraguera, nuestra finca propia
Llevar hasta tu hogar el auténtico ibérico de la Sierra de Huelva, con el mismo respeto por la tierra, por el tiempo y por la tradición que ha definido siempre nuestra historia.
Nuestros cerdos ibéricos crecen en un entrono natural muy singular, la dehesa, formada principalmente por encinas. En este escenario idílico es donde el cerdo ibérico se alimenta durante los tres últimos meses de su vida exclusivamente de bellotas y pastos naturales, período denominado como “montanera”.
Selección Artesana no es solo un nombre: es la promesa de un producto cuidado, sincero y hecho como siempre se ha hecho en la Sierra de Aracena.
Compromiso de Calidad
Alimentados en Montanera
Producto totalmente artesanal
Criados en nuestra Finca
Secadero propio en Santa Ana la Real
Secadero en Santa Ana la Real
En Selección Artesana creemos que solo de una gran dehesa nacen los grandes ibéricos.
Por eso, uno de nuestros mayores orgullos es contar con nuestra finca propia, La Esparraguera, situada en pleno entorno natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche (Huelva), un enclave privilegiado reconocido como Reserva de la Biosfera por la UNESCO.
Pero el camino hacia la excelencia no acaba en el campo. Tras la montanera, nuestro secadero propio en Santa Ana la Real toma el relevo. Gracias a su microclima privilegiado y al saber hacer de nuestros maestros jamoneros, cada pieza se cura de forma natural y artesanal, alcanzando un aroma, textura y sabor inconfundibles.
